El wrap dress de Diane Von Fürstenberg
Hace un par de días decidí sacarle tiempo a mi tiempo libre y empecé a arreglar mi closet. Ya sabes, cosas que hacemos mientras allá afuera ocurre una pandemia. Gracias a esto, noté que tengo muchísimas piezas que no he usado nunca, y de repente mi atención se fue directo a un vestido negro, sencillo pero al mismo tiempo mítico: el wrap dress de Diane Von Fürstenberg (DVF). Había olvidado que lo tenía.
En ese mismo momento, me lo probé y simplemente no entendí cómo ha estado tanto tiempo colgado sin ser usado – bueno, claro, estamos en cuarentena, pero hasta para hacer desayuno debería poder usarse-. Esta es la historia de esa maravillosa pieza.
DVF nació en 1946 en Bruselas, Bélgica. Su nombre de nacimiento fue Diane Simone Michelle Halfin pero a los 18 años conoció a su primer esposo, Egon von und zu Fürstenberg, hijo de un príncipe alemán, de quien tomó su famosísimo apellido, por el que hoy la conocemos.
Por un tiempo, Diane fue princesa (aunque esta no es una historia de realeza).
En los 70´s el wrap dress revolucionó
Llegó la década de los 70 y a su vez, miles de cambios se dieron en el mundo. La década pasada había dado paso a una revolución del amor y el paradigma del mundo ahora se enfocaba un poco más en la igualdad de género.
El rol de la mujer empezaba a estar mucho más presente. Era un momento sin precedentes para la música, los movimientos artísticos y claro, para la moda.
En ese momento, Diane, sin ser diseñadora, decide emprender y fundar su propia marca homónima. Se comenta que utilizó USD $30,000 para esto.
Diane era una socialité que se juntaba con la gente más top: Bianca Jagger, Andy Warhol, y básicamente todos los que se apuntaban a las fiestas de Studio 54.
Diane conocía muy bien lo que quería la mujer moderna de la época y básicamente diseñó con ese propósito: darle power a través de su vestimenta.
Cuenta la leyenda que un día, Julia Nixon Eisenhower -hija menor del ex presidente Richard Nixon- apareció en TV con una falda y un top anudado. Fue en ese momento cuando DVF tuvo la idea de crear el mítico vestido que envuelve el cuerpo de la mujer.
Este momento marcó un antes y un después en la moda. La silueta que creó, sin zippers ni botones, abraza la cintura de quien lo usa y por eso termina siendo tan favorecedor en todos los cuerpos, sin importar la estatura ni el peso. Además, podías encontrarlos en distintos estampados y colores.
Las líneas de los diseños de DVF estaban inspiradas en la mujer del momento, sexy, confiada, y con cada vez más ganas de romper paradigmas. Era un momento en el que la vida se llevaba más afuera de casa que adentro y ella estaba lista para acompañar día y noche a su clienta.
Las ventas del vestido se mantuvieron en alza y el wrap dress le consiguió a Diane un lugar en el top 10 de los mejores negocios dirigidos por mujeres en Estados Unidos.
En el cine, muchas representaciones de los años 70 como el film American Hustle de David O. Russel muestran lo popular que es dicha silueta para estilizar y empoderar a los personajes femeninos.
En esta película, podemos ver a Amy Adams interpretar a Sydney Prosser y usar distintas piezas firmadas por la diseñadora belga. Su personaje se deja percibir como una mujer que sabe lo que hace y que es segura en sus pasos. Justo como yo siento que es la mujer que viste DVF.
Puedes encontrar este modelo en todas las colecciones firmadas por Diane y claro, en INDITEX si tienes un presupuesto menor. ¿Qué opinas de este fabuloso vestido? ¿Lo has usado?